Mi nombre es Almut Reifsteck. Antes de convertirme en psicoterapeuta he sido enfermera, traductora y he trabajado en las ramas de finanzas e inmuebles. Desde el 2005 trabajo como profesional de la salud especializada en psicoterapia. Mi lengua materna es el alemán, pero como yo he vivido tres años fuera de mi país sé lo importante que es poder contar algunas cosas en el lenguaje materno propio, sobretodo cuando se trata de emociones, situaciones vividas en la niñez o problemas de pareja interculturales.
Los temas centrales tratados en mi consulta son:
Terapia de traumas
– la mayoría de las personas piensan que un trauma se debe a una situación horrible y desbordante, como un accidente, una catástrofe natural, una guerra o un episodio de violencia sufrida. Y es cierto que todas estas situaciones pueden desencadenar un trauma, aunque no siempre. Porque lo decisivo es mi vivencia de esta situación. Es importante distinguir entre lo dramático en el exterior y el trauma en el interior. Un mecanismo de supervivencia que utilizamos es separar el episodio de la vivencia y enterrar los componentes lo más separado posible en las profundidades de la memoria. Por eso no suele ser fácil relacionar los síntomas manifiestos con un episodio en particular. Pero la buena noticia es que dar este paso no es siempre necesario para poder superar una vivencia traumática grabada en nuestro cuerpo.
Molestias psicosomáticas
– estoy enferma? O está todo en mi cabeza? A veces miramos la enfermedad igual como examinamos un coche roto: qué bueno sería poder cambiar la pieza defectuosa, pintar por encima y ya está como nuevo!. Esta visión puede funcionar de manera adecuada en el caso de una pierna rota, pero no es lo recommendable en el caso de enfermedades crónicas. En el ayurveda, en la medicina tradicional china e incluso en nuestra medicina natural o integral no se separa el alma del cuerpo. La salud se alcanza equilibrando el cuerpo, la psique y el alma.
Trastornos de ansiedad
– quien sufre de miedos o ataques de pánico vive una vida estrecha y monótona. Se termina evitando todo lo que pueda ser un disparador potencial del miedo. Viajar? En casa se está muy bien. Salir? No, todo es tan ruidoso y está tan lleno. Hacer la compra? Es mucho más moderno pedir al supermercado. Llamar por teléfono? Tampoco es que tengamos una relación tan estrecha… . Durante un tiempo funcionan las excusas, después al miedo se le une la soledad. A quien ha vivido en estrechez le parecerá imposible participar de nuevo en la vida, pero verás que es posible!
Depresión
– en tu día a día solamente funcionas y te ocupas de lo que hay que ocuparse. Pero en tu interior te sientes superada, desesperanzada, no te soportas a ti misma. En seguida te frustras y te enfadas, a la vez que te entristeces y lloras con facilidad. O te sientes vacía y sorda por dentro. Estás agotada porque no duermes bien pero no puedes parar de pensar y dejar paso al sueño. Por eso te cuesta concentrarte o recordar cosas. De repente comes más o bastante menos de lo que necesitas, continuamente te duele algo (la cabeza, el estómago, la tripa). Hay muchos síntomas que pueden indicar la presencia de una depresión y es importante entender que una depresión no es lo mismo que tristeza o duelo, sino la pérdida de la vivencia emocional. Y que tampoco hace falta siempre una razón de peso para deprimirse, porque la depresión suele venir a pasitos pequeños. Por eso no existe un interruptor para apagarla. Para tu terapia esto significa que la depresión no desaparece rápidamente, que habrá días buenos y malos, porque es un proceso.
Burnout
– ya no te sientes unida a tu familia y amigos? Aplazas más de lo normal terminar las cosas porque hacerlas te supera? Ya no cuidas de tí (deporte, comida, sueño)? Estás agotada corporal- y emocionalmente? Estás cansada y en tensión a la vez pero no puedes dormir bien por las noches? Todo esto son signos de que avanzas hacia un burnout. Es tiempo de tomar medidas.
Estrés
– nuestro cuerpo está hecho para manejar el estrés puntual. Algunas personas incluso disfrutan resolver asuntos bajo presión. Otra cosa es el estrés crónico, que conduce a trastornos del sueño, taquicardias, hipertensión, inflamación generalizada, depresión del sistema inmunitario, trastornos de memoria, sensación de cabeza pesada, grasa abdominal, carencia de nutrientes y aumento del riesgo de padecimiento de cáncer. Cada persona tiene su nivel particular de resistencia al estrés, pero independientemente del aguante de cada cual, todos necesitamos maneras de manejarlo. Porque no siempre podemos reducirlo ya que algunas situaciones escapan a nuestra influencia, sí podemos reducir el estrés interior y encontrar relajación. Juntos encontraremos las medidas adecuadas a tu día a día.
Terapia de pareja
– en todas las relaciones hay conflictos, lo decisivo es cómo los manejamos. Para algunos eso no es una tarea sencilla: el manejo de conflictos en las relaciones lo aprendemos en la niñez observando a nuestros padres, y así reaccionamos con retraimiento emocional, rabia, hiriendo, con desconfianza, desprecio, silencio, ignorancia… . La terapia de pareja puede ayudar a reconocer estos patrones de conducta y reemplazarlos por otros más constructivos. Un conflicto resuelto hace más fuerte y segura la relación y aunque es cierto que para que una relación funcione bien hacen falta dos, a menudo la valentía de una de las partes que se atreve a empezar pone en marcha el cambio necesario.
Trabajo de respiración y cuerpo
– la primera y más importante relación que tienes es con tu propio cuerpo y respiración. Pero cuántas veces suelen ser lo último en nuestras vidas! Cuándo ha sido la última vez que has respirado profundamente? O has contemplado tu cuerpo con contento? O lo has mimado con un baño caliente, con una camisa suave, o una comida excelente? Quizá consideres a tu cuerpo como deficiente, como una carga o incluso como tu enemigo. Independientemente de cómo lo percibas o cómo lo trates una cosa es segura: lo necesitas. Y tu cuerpo necesita toque y contacto. Esto NO se realiza de manera sexual, la ropa interior se queda puesta. Experimentar contacto corporal con tus condiciones en un lugar seguro puede ayudarte reconciliarte con tu cuerpo, a relajarte, a sentirte viva.
Mis métodos:
Trabajo de manera integral y global según mi convicción de la unidad existente entre cuerpo, psique y alma. En qué temas hay que focalizarse se muestra en el proceso y según el transcurso de la terapia.
El cambio necesita de la valentía para comenzar y el corazón humano está hecho para la aventura. A mi entender, la mayor aventura es el viaje hacia el interior! A veces se necesita algo de apoyo, una compañera de viaje o un guía. Me alegro de poder serlo para tí.